Pregunte a un experto
Para planificar la solución adecuada es necesario conocer los requisitos de su sistema y de sus proyectos. Permita que los expertos de Kingston le orienten.
Pregunte a un expertoRob May es el fundador y director general de Ramsac, cuenta con un equipo de más de 100 consultores que trabajan con él para ofrecer servicios/soporte de tecnología y ciberseguridad (y lo ha hecho durante más de 30 años).
Rob es el Embajador del Reino Unido para la Seguridad Cibernética para el Institute of Directors, y ocupa el puesto número 5 en el ranking mundial de Cyber Security Thought Leaders/Influencers o Líderes/Influencers de pensamiento en seguridad cibernética. Es miembro del Consejo Asesor del Cyber Resilience Centre for the South East o Centro de resiliencia cibernética para el Sureste, trabajando con la industria, el mundo académico y los organismos de seguridad. También es autor, líder de opinión y orador internacional galardonado.
Para muchas organizaciones, este es el año en que planean reemplazar una gran cantidad de equipos informáticos comprados durante la era del confinamiento. El período de confinamiento por COVID fue un momento interesante para las compras de hardware, las demandas extremas y la escasez de existencias hicieron que algunas personas terminaran con equipos por debajo de las especificaciones habituales, mientras que para otras sucedió lo contrario. Ambos escenarios afectarán las decisiones del siguiente paso. En muchos casos, los nuevos equipos son realmente apropiados (por una multitud de razones que discutiremos), pero también hay muchos escenarios (igualmente explorados) donde la actualización es prudente.
En mi opinión, el líder de la industria desde hace mucho tiempo en actualizaciones es Kingston Technology, y recientemente participé en uno de sus eventos que exploraba este mismo tema. Se plantearon varias preguntas, y el propósito de este artículo es compartir las respuestas para ayudarle a reflexionar sobre el tema.
Uno de los puntos de vista era actualizar todo, considerándolo con el aumento de los costos de los negocios y la vida. Es difícil justificar nuevas compras de hardware a menos que los contratos actuales de soporte y mantenimiento estén caducados. Agregar memoria y almacenamiento de Kingston permite velocidades de procesamiento más rápidas, lo que reduce el tiempo de carga y mejora la productividad y la eficiencia.
Siendo objetivos, la respuesta para muchos es sí, pero es importante tener en cuenta las necesidades de rendimiento de la organización y sus usuarios. ¿Qué aplicaciones se están utilizando y si funcionarían mejor con equipos actualizados? Es probable que el hardware más antiguo ya no sea compatible con los fabricantes, lo que lo convierte en un desafío. Por lo tanto, al actualizar, las organizaciones pueden minimizar el tiempo de inactividad y maximizar la confiabilidad del sistema.
Realmente depende de la organización y sus necesidades en términos de presupuestos y vida útil. El hardware existente puede significar que el rendimiento se vea obstaculizado, y una actualización puede resolver eso. Evalúe igualmente la evolución de las amenazas cibernéticas, el hardware más nuevo podría mejorar la seguridad, potenciando la actualización. La actualización del hardware tecnológico permite a las organizaciones planificar el crecimiento y la escalabilidad, y sin inversión adicional.
La velocidad a la que se propagó el COVID, el posterior confinamiento en marzo del 2020 y la continua necesidad de aislamiento y cuarentena significó que muchas organizaciones tuvieran que pasar muy rápidamente de una fuerza laboral en gran parte estática y de oficina a una completamente móvil y doméstica, a menudo terminaron con hardware no estandarizado para distribuir a los usuarios y hay muchas máquinas que funcionarían mejor con más DRAM o SSDs más rápidas.
Es esencial que las organizaciones continúen evaluando sus necesidades tecnológicas y planifiquen actualizaciones periódicas de su infraestructura. La evaluación periódica ayudará a identificar las áreas que necesitan mejoras y aprovechar las nuevas tecnologías para mejorar la eficiencia, el rendimiento y el soporte de la organización y escalar sus requisitos de seguridad.
Las actualizaciones y los parches suelen ser muy importantes por motivos de seguridad. Pero deben equilibrarse con los costos. Los sistemas antiguos pueden afectar la productividad / eficiencia y crear riesgos de ciberseguridad. O puede actualizar debido a los nuevos requisitos informáticos, como las IA o las interacciones en tiempo real con los miles de puntos finales 5G.
Las organizaciones son cada vez más eficientes cuando se trata de mantenerse al día con la tecnología y la seguridad. Los cambios en los sistemas operativos y las versiones que llegan al "final de su vida útil" exigen cambios. Después de la prisa por trabajar a distancia durante la pandemia, las empresas han tenido la oportunidad de abordar los errores y evaluar sus necesidades a largo plazo para satisfacer las necesidades de las aplicaciones y los sistemas modernos. La regulación y la evolución de los estándares de seguridad están impulsando la necesidad de aumentar las capacidades cibernéticas y, a su vez, mejorar el rendimiento de la infraestructura de TI.
Otros factores que han empujado a las organizaciones a actualizar su infraestructura de TI existente son:
Las organizaciones reconocen cada vez más el impacto ecológico de reemplazar sistemas completos y, en cambio, optan por actualizar ciertos componentes como DRAM y SSD cuando es necesario. Garantizar la longevidad requiere el tipo de planificación a largo plazo que podría haberse perdido durante el apuro de la pandemia por trabajar a distancia. Al prolongar la vida útil de los dispositivos mediante la actualización en lugar de reemplazar sistemas completos, las organizaciones pueden alargar su ciclo de actualización tecnológica de 3 a 5 años.
Tradicionalmente, muchas empresas se han inclinado por reemplazar regularmente sus equipos, ya sean computadoras, servidores, smartphones u otros dispositivos tecnológicos. La actualización ha ayudado a muchas organizaciones a obtener más valor y extender la vida útil de las inversiones existentes. Con las mejoras de hardware y software, muchos equipos pueden admitir funciones más avanzadas a pesar de ser kits más antiguos.
En los últimos 3 años, las organizaciones han tenido que hacer frente a enormes aumentos de costos, primero para facilitar los confinamientos, luego la crisis energética y el alto costo continuo de muchos productos básicos. La actualización tiene una ventaja de sostenibilidad al hacer uso de los sistemas existentes y ahorrar un presupuesto muy necesario.
Con esto depende del caso de uso. Si sus ingresos no dependen de las transformaciones tecnológicas, entonces sí. Pero con el aumento del Internet de las cosas (IoT) y otros avances, las organizaciones deberían considerar invertir en nuevo hardware o soluciones escalables en la nube. Además, a medida que las organizaciones adoptan nuevas tecnologías y escalan sus operaciones, es esencial contar con hardware que pueda manejar las mayores cargas de trabajo y el volumen de datos.
En última instancia, se trata de lograr el equilibrio correcto y exprimir cada gota de capacidad de la infraestructura y las aplicaciones. Al mantener el hardware actualizado, las organizaciones pueden adoptar tecnologías emergentes, desbloquear todo su potencial y mantenerse competitivas en este panorama digital.
Algunos opinan que tiene sentido actualizar solo cuando se requieren múltiples actualizaciones (memoria, CPU y almacenamiento) para que sea rentable debido a la mano de obra requerida, de lo contrario, podría tener más sentido reemplazar la máquina. Realmente depende de dónde se encuentre en el camino de la actualización.
La infraestructura actualizada con arquitecturas modernas como la nube, la virtualización y el sistema de contenedores puede admitir nuevas tecnologías como AI, automatización, edge computing etc. Las actualizaciones también permiten la integración con nuevas plataformas de datos para mejorar los procesos de negocio.
La tecnología está moviéndose a un ritmo que no habíamos visto antes. La compatibilidad será un punto de fricción, pero la oportunidad de aumentar el rendimiento a través de cosas como los SSDs NVMe plantea muchos beneficios para la optimización de la arquitectura.
Tenga en cuenta que la actualización no siempre es suficiente, es posible que se requiera nueva tecnología porque algunas cosas simplemente no se ejecutan en plataformas antiguas. ¡Un sistema operativo que está "al final de su vida útil" es un gran riesgo de ciberseguridad y los discos duros de servidores viejos con partes móviles y software antiguo llegan a un punto en el que simplemente se deben ir!
En primer lugar, las organizaciones deben determinar los desafíos de compatibilidad e integración entre el hardware existente y la plataforma de última generación para garantizar que esto no interrumpa las operaciones actuales como parte de su estrategia a largo plazo. La competencia impulsa el rendimiento de la empresa y la mejora de los ingresos podría aumentar la cuota de mercado.
Las plataformas de última generación desempeñan un papel importante en la evolución de las tecnologías y las prácticas comerciales. Están diseñadas para aprovechar los avances tecnológicos, como la inteligencia artificial, el aprendizaje automático, la computación en la nube y el Internet de las cosas.
Para algunas organizaciones, la sustitución inmediata de los sistemas antiguos puede no ser factible debido a restricciones presupuestarias o prioridades contrapuestas. Aquí es adecuado un enfoque de actualización por fases:
Las organizaciones deben estar continuamente mirando hacia el futuro, entendiendo lo que se avecina y planificando. Ahora utilizamos mucho más vídeo, lo que supone un gran consumo de potencia de procesamiento, almacenamiento y conectividad y, por supuesto, un mayor uso de la IA.
Kingston Technology apoya a las organizaciones que buscan actualizar su infraestructura. Al ofrecer memoria de alto rendimiento y soluciones de almacenamiento para maximizar el rendimiento del hardware existente y prolongar la longevidad de los dispositivos. Pero también, su guía y colaboración ayudan a las organizaciones a encontrar las mejores soluciones.
Todos los planes de actualizaciones o preparativos para el futuro deben tener la seguridad incorporada, y a veces es necesario revisar las compras anteriores teniendo esto en cuenta, corrigiendo los errores anteriores. Kingston tiene una gran experiencia en memoria y almacenamiento y siempre puede ofrecer este conocimiento para ayudar a las organizaciones con sus necesidades de actualización.
Kingston puede respaldar las actualizaciones a través de componentes de alto rendimiento, calidad y confiables como SSDs y DRAM para PC y servidores. Soluciones de centros de datos para almacenamiento y servidores. Y dando orientación sobre las mejores configuraciones y arquitecturas para una infraestructura preparada para el futuro.
Los productos de Kingston siempre han sido mi primera opción al comprar actualizaciones. ¡El soporte de ventas y el soporte posterior al servicio es fabuloso! ¡El precio es bueno, el rendimiento es excelente y la gente es muy agradable!
Estamos operando en un mundo de negocios con un clima económico en constante evolución después de la pandemia. Los avances tecnológicos y la necesidad de productividad impulsan la transformación digital y, como tal, existe la necesidad inevitable de actualizar la infraestructura tecnológica existente.
Es importante garantizar el equilibrio entre los costos y beneficios de la actualización. La incorporación de mejoras en el hardware y el software puede mejorar la eficiencia, la seguridad y la productividad de una organización. Pero la actualización no siempre es la solución definitiva, en muchos casos, ofrece un camino viable para prolongar la vida útil de las inversiones existentes, optimizar el rendimiento y reforzar los protocolos de seguridad. Si bien la infraestructura existente a menudo se puede actualizar para hacer frente a los avances tecnológicos, habrá momentos en los que los sistemas y tecnologías más nuevas, como la computación en la nube y la inteligencia artificial, serán más beneficiosos.
Por lo tanto, una evaluación exhaustiva de las capacidades tecnológicas actuales y las necesidades futuras de cualquier organización es fundamental para decidir el equilibrio entre la actualización y el reemplazo de los sistemas.
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Para planificar la solución adecuada es necesario conocer los requisitos de su sistema y de sus proyectos. Permita que los expertos de Kingston le orienten.
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